25 jul. 2011

Ganar la Copa cambió nuestra imagen, ¿cambia también nuestra identidad?

Tenemos logo, tenemos jingle, tenemos color coporativo, tenemos héroes, tenemos épica, tenemos reputación. No cabe duda que tenemos todos los elementos de una identidad corporativa consolidada. Chile tuvo a sus mineros y Uruguay tiene a sus futbolistas como apalancamiento de su posicionamiento a nivel global. Pero ganar la Copa de América no sólo contribuirá a consolidar una imagen a nivel mundial. Darwin dice que todo seguirá igual en Uruguay...pero creemos que no. Creemos que el Mundial de Sudáfrica y la Copa de Argentina son momentos de la verdad que también modificarán nuestra identidad nacional. Porque como hemos dicho otras veces, cómo creemos que nos ven los otros influye en nuestra propia percepción sobre nosotros mismos. Este campeonato nos permitirá mantener, reforzar y revalorizar algunos atributos que parece son rasgos constitutivos de la "uruguayez": humildad, sobriedad, educación. Pero esta reputación ya la conocíamos (aunque no siempre la honráramos). A lo que no estábamos acostumbrados era a que los otros (otros países, otras miradas) destacaran nuestras destrezas, nuestras capacidades, nuestras estrategias, nuestros procesos, a que nos pusieran de ejemplo y que nos denominaran "reyes de América." Además de considerarnos "buenos muchachos" ahora empiezan a considerarnos eficientes y eficaces. Antes éramos "el hermanito bueno e inofensivo"...ahora somos de temer, de admirar. Nuestra historia se resignificó porque el presente le dio un nuevo sentido. Ahora además de una identidad anclada en el pasado y en la nostalgia, tenemos una identidad cargada de presente y de esperanza, y eso, es probable que haya cambiado o esté cambiando lo que somos.

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